14.10.10

Yo, tú, ellos

Dímelo. Sólo dímelo. No lo expliques. Yo no lo hice. No lo necesitas. Si están allí iremos. Lo sabes. Lo sabías cuando viniste a buscarme. ¿Cuántos son? Antes no pensábamos en números. Íbamos y allí descubríamos que debíamos haberlo pensado antes. Ahora sí. Nos estamos haciendo viejos. Lo sabemos. Pero aún así, aunque no salgan las cuentas, iremos. Seremos estúpidos, sí, pero jamás cobardes. Dímelo. Sabes que iré. Tan sólo hazlo. Vamos, suéltalo. Rápido. Sin detalles. Iré como tú viniste cuando yo te lo dije. Sin hacer preguntas. Sin dudarlo. Sólo quiero saber cuántos son. Tal vez no podamos ir solos. Tal vez no debamos. Sé que lo hicimos antes. Ahora es diferente. ¿Tú te sientes igual? Antes hubieras llegado y me lo hubieras dicho. Ahora dudas. No te atreves. Vamos, ya esta, dímelo e iremos. Tú y yo. Enfrente ellos. Pero no me des explicaciones. Prefiero no saber por qué vamos.

No hay comentarios: